jueves, 23 de abril de 2020

LAS DIVERSAS LECTURAS DEL AGUA. VILLANUEVA DE LA FUENTE.





Los dioses te sean propicios, Villanueva, o quizás debería llamarte Mentesa Oretana. 
Hoy voy en busca de tus manantiales, donde nace el río que pone nombre a tan singular población.
Ahora que todo es calma y silencio, intento aproximarme a aquella época, la del Medievo, en la que brillaba con luz propia vuestra Feria, que atraía tantas gentes, y todos valoraban la calidad de vuestras fuentes.



La primera vez que te vi fue cuando buscaba los baños del Cristo.
Entonces debí remontar tu curso para encontrar tu nacimiento pero el exangüe balneario, el castillo, las higueras, la imagen del Cristo...todo fue una sucesión de felices hallazgos, y simplemente te olvidé.



No hay olvido que no se merezca una disculpa. Olvidos que vas dejando aparcados, quizás anotados en un cuaderno, relegados. 
Lo cierto es que ahora que os veo, espejos de agua, acabo trasladándome por una casual similitud al puentecillo que lleva al camino del Cristo, forzados a ser reflejos inabarcables.
Y os pienso, tal como lo sugiere el día, como cuando antes era ahora, y ahora nunca será después.



De las diversas formas que tiene a buen hacer el brotar un río, la tuya era de lo más curiosa. Nada de desencuentros.



Tuve que hacer acopio de diversas lecturas, aquí, allá y más allá...¿hasta cuántos veneros pude ver?
Tan cambiante, tan irrepetible, así te vi, río Villanueva.



Sacralizar los manantiales es tan antiguo como el mismo hombre. Aquí contemplo a la patrona de Villanueva, la Virgen de los Desamparados.
Y leo que este nacimiento lo forman tres manantiales: Pilar Grande, Pilarete y Pilar del Huerto.



Y sí, me senté porque tanta lectura me descolocaba felizmente. Me posicionaba hacia tus diversas formas y sentía la necesidad de  elegir.




Rellené tantas hojas en mi cuaderno como las que encontré por tus fértiles jardines.



Dioses romanos que devienen de dioses griegos.
El dios Fons habita en cada fuente, aceptando que el envoltorio cambia pero nunca la esencia. Así las ninfas o náyades continúan habitando en tus aguas calmas, rociadas de eternidad.




Pero quizás sea cuando tu cauce se rellena e inflama de todos los veneros cuando tu fuente-lavadero se colma de fortuitas cascadas.



Hoy que pienso en el olor anisado del espino y no puedo traerlo hasta aquí, igualmente me alcanza el sonido que te traes entre manos y que tan lejos queda de todas las estancias donde solo un grifo es nada más que un sencillo alivio.




Y pienso que me pierdo tus momentos de remolino al alza.




Y no me conforma reconocer que no puedo devolverte los sonidos de las lavanderas.



Ahora sois quejidos de agua cuando no se la admira de cerca.
En 1987 ganásteis, habitantes de Villanueva, "la guerra del agua"
Os despojaron de vuestros manantiales, los exprimieron y secaron y los volvísteis a recuperar.



El agua con sus diversas lecturas termina escapando lejos.
Te imagino como la náyade Aretusa, la que se transformó en corriente fluvial escapando del dios Alfeo. O como la ninfa Egeria que con sus constantes lágrimas devino en fuente.




Y arrastrando sueños de espuma,
galopa lejos del triste duelo. 
Las ninfas, traductoras del agua, versifican las lecturas que el agua expende en sinuosas ondas.




Para acabar remansándote y quedar quieta a la espera, la dulce espera.
No quise acercarme a ti porque quizás Narciso acabase de caer en tu entramado de gotas furtivas, de redes encendidas de esmeraldas. Némesis castigó la vanidad del joven, enamorándolo de su propio reflejo en una fuente.




La puerta abierta por si quiere salir a escena la ninfa Anna Perenna, que tras ahogarse tomó a bien disolverse en el líquido elemento y reencarnarse en corriente fluvial. 
Así cada vez que te miro pienso en ella y en las lecturas que hacemos del agua cuando no podemos dejar de versionarla, de adivinarla.


Una imagen vale más que mil palabras, un mapa incluye los nombres de todo aquello que no debe olvidarse.
1954.

Fotografías de Rosa Cruz.

En el Día del libro, 23 de abril del 2020.

"La pluma es la lengua del alma"
Cervantes.


2 comentarios:

  1. Y de Villanueva de la fuente tengo que decirte que sensacional, vamos a aprender mucho con tu geografía de Castilla la Mancha, y nunca mejor hecho en el día del libro.
    Tú dices la pluma en la lengua del alma de Cervantes, pues yo digo que tienes una capacidad muy bonita esto te viene desde siempre, la lectura y la escritura esto se lleva en el alma.

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    1. Para cuando se pueda salir con libertad acordaros de venir a Villanueva y ver este maravilloso espectáculo del nacimiento y seguidamente pasar a imaginaros ser corriente fluvial y veréis los molinos que aún siguen en pie, un paseo delicioso. Muchas gracias, un abrazo.

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