viernes, 12 de diciembre de 2025

UN CALENDARIO PARA RECORDAR EL AÑO QUE SE NOS VA

 



"El árbol de la vida es la comunicación con los amigos; el fruto, el descanso y la confianza en ellos"

Quevedo.







Quisiera ofrecerles un "calendario" con esas imágenes y palabras que me llevaría al lugar donde anidan las inquietudes. Un calendario con citas de nuestros escritores. Reconocidos o no como tales. Nacidos en este Campo de Montiel o vinculados a estas tierras por querencia, por ese candor que si bien al primer contacto es trémulo, engancha a la aparente sobriedad de estos parajes. Porque aquí casi todo es apariencia. Un paisaje que se presta desde hace siglos a ser literario, que ha derivado en una cantera de escritores que nunca se verá agotada. Porque las palabras solo maduran si se redactan, así no les alcanzará el dardo de la desmemoria.

Si en un principio barajé la idea de que serían doce las imágenes de este "calendario" fui dándome cuenta de la necesidad de ir ampliándolo, incorporándole, conforme los días pasen, más citas.

Las imágenes que ustedes verán son el resultado de ese transitar caminos, serpenteantes trazos que en solitario he ido adquiriendo como propios, tras sentirlos extraños al inicio. ¿Cuántas veces se ha de hollar una vereda para conseguir que te abra su alma errante?

Así sucede que por la vida no puedes pasar deprisa, tu recorrido te hará dar vueltas y retrocesos. Y nunca des por terminada una partida, el inicio no lleva inscrito el final. 

Seamos a veces Quijotes, caminando por los derroteros de la ilusión. Y otras, Sanchos, tras entender que se transita mejor en compañía. Así, libros y citas, de ellos extraídas, nos seducirán sin litigar desasosiegos y acrecentando los afectos.



















































































Dedicado a Enriqueta González por su dedicación a los demás.




10 comentarios:

  1. Está todo muy bien, las fotografías muy bonitas y los textos muy bien también.. Enhorabuena x la publicación.😊

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    1. Lo visual unido a lo escrito acaba por ganar adeptos. Muchas gracias, un saludo.

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  2. Gracias, Rosa, por este recorrido visual y literario, que rezuma amistad. Un fuerte abrazo

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    1. Aquí hay autores que no conozco pero de los que sí he leído parte de su obra. Qué gran cantera tiene este Campo de Montiel. Trato de seguir dándoles visibilidad a los detalles, a los paisajes y qué mejor aderezo que las palabras bien sentidas. Gracias a ti, un abrazo.

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  3. Lo cierto es que la desnudez de su epidermis le confiere ese grado de autenticidad, de pureza de sus colores, que otras paisajes ocultan bajo una artificialidad engañosa. Pienso que ese es el verdadero don de estas tierras y el verdadero motivo de porque engancha al viajero que mira, y disfruta, con los ojos de la mente y no cae vencido por el selfie huero y la apremiante inmediatez de una sociedad quebrada. ¡¡Enhorabuena, Rosa!!

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    1. ¡Qué belleza y qué verdad guardan tus palabras! José María, cuando parto de estos campos voy intentando encontrar, en otros lares, paisajes semejantes a los barrancos de Almedina, y no los hallo. Si te fijas ganan en mayoría las imágenes que muestran esta aparente sobriedad del color rojo, pero amigo, hay que hollar estos senderos y salirse de ellos y tratar de hundir los pies en la fina arena y hallar lo que esconden estos granos infinitos. Es un recorrido histórico sin igual, a mí me sigue inquietando el pasear por estos excepcionales parajes. Sin duda, no quisiera ahogarme en la desmemoria sin llevarme un trocito de estos campos montieleños.
      Siempre te estaré agradecida y espero no tardar en mostrarle al lector tu trabajo, excepcional, sobre la iglesia de Villamanrique. Gracias, siempre, un abrazo.

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  4. Gracias por compartir nuestras palabras y la belleza de la tierra. Un abrazo.

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    1. ¡A tu padre y a ti tengo tanto que agradecer!, como el sentido de la verdadera amistad y ese primer contacto con vuestros poemas y con la tierra. Mil gracias. Un abrazo.

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