"El árbol de la vida es la comunicación con los amigos; el fruto, el descanso y la confianza en ellos"
Quevedo.
Podría escribir una lista de razones por las que reabrir el blog, por ejemplo, el otoño y las horas quietas, como hojas caídas, sobre las que reiniciar el anhelado caminar; sin embargo me mueve a hacerlo el hecho de que Petra decidiera aceptar el exponer en la Casa de Quevedo. Razón más que suficiente para intentar, por mi parte, acercarles el trabajo de años, organizado, pulcro, intenso, que esta almedinense ha dejado a buen recaudo. Como diría Quevedo:
"Lo que en la juventud se aprende, toda la vida dura"
Siempre he pensado que el arte que genera cada autor debía salir del hogar donde se encontraba cobijado. No podemos discernir la calidad de un trabajo si no es expuesto, si no se comparte. El dejarle "volar" debe ser, a mi opinión, una decisión firme. Así el acercamiento al público será la razón para seguir, por el hecho de perpetuarse más allá del museo, en la inquietud de quienes lo visitan. Será ese estrecho lazo el que fortuitamente genere gratitud.
Vega, y no me canso de decirlo, es la mejor maestra de ceremonias, la amiga que abre las puertas del museo, que cuida con tanto esmero, a quien desee exponer su obra.
Y Petra, por primera vez, le deja su variopinta colección donde hay cabida para coloridos óleos, para cuadros donde los metales se alean para reafirmarse en el poder visual que trasmiten, donde las calabazas son el "esqueleto" de mágicos "duendes" que retornan de su lejana y añorada infancia.
A mí me subyuga el color, la destreza, la minuciosidad que esta artista plasma en su obra. Admiro a Petra porque ha aprendido a sanar heridas suturándolas a base de firmes pinceladas. Su don es no desfallecer en las lagunas a las que nos arroja la vida; su salvación, el arte de imponer a los pinceles que recreen un mundo mejor.
Ciertamente ponemos poca atención en lo que nos rodea, pasamos sin ver ni apreciar las cosas tan sencillas y comunes, pero que esconden tanta belleza y misterio. Enhorabuena, Petra.
ResponderEliminarQué bonito. Con pocas palabras expresas la realidad, gracias.
EliminarMe ha encantado la exposición por la variedad y técnica, enhorabuena a la autora
ResponderEliminarMuchísimas gracias
EliminarEn principio, dar la enhorabuena a Petra por su labor de artista. Su gran variedad de técnicas y de temas aporta a la exposición una personalidad propia. No tardaré en acercarme a verla en vivo y en directo en esa histórica casa de Quevedo. Gracias, Rosa por volver a abrir el blog, lo has hecho con la exposición de Petra y ha merecido la pena. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras, Rosa me ha contado que eres una gran persona y un buen pintor y escritor, así que doblemente me halagan tus palabras, creo que si miras en la página de la Casa de Quevedo verás mejor el horario por si hay alguna variación, como si Vega cierra por vacaciones, gracias
EliminarEnhorabuena Petra, aunque no la conozco está hecha un artista buen repertorio un poquito de cada cosa, también quiero ver la exposición si Dios quiere, gracias Rosa por tu blog por esa oportunidad que nos das a todo@s.
ResponderEliminarMuchas gracias Francisca, te gustará la exposición, he intentado llevar lo mejor que tengo aunque se han quedado en casa otro montón de obras pero lo más representativo está allí, gracias
EliminarEnhorabuena Petra, me encanta tu obra, eres muy completa ,sabes sacar partido a cualquier objeto, a eso se llama ser creativa.
EliminarUn beso..
Muchas gracias por tus palabras
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