"Un hombre no planta un árbol para sí mismo. Planta un árbol para la posteridad"
Alexander Smith.
Pasaremos por la vida quizás de "puntillas" y si somos recordados, será por nuestros actos y ¿por qué no por aquello que plantamos? Es algo recurrente que me sucede cuando miro hacia ese enorme "bosque", ahora"bosquejo" de lo que llegará a ser, porque aún los árboles no impiden ver los montes, algunas, como las acacias, aisladas, sí.
Fuera ruge la tormenta y puede que sea eso, el hecho de nacer entre tormentas, lo que ahora me devuelva al pasado. Aprendí a cultivar semillas de la mano de mi madre, a podar, a trasplantar, a "sanar", esos menesteres que nos unen más allá del tiempo, que se vuelven innatos en nosotros y que donamos después a nuestros hijos (el mío es un buen jardinero). La "semilla" de este saber va creciendo cuando el niño hace mil preguntas y gracias a las respuestas y a los momentos compartidos el aprendizaje permanecerá para siempre en ellos.
Vuelve a llover y eso me llena de tantos recuerdos...
Pero vamos a centrarnos, plantemos árboles, a partir de semillas, de esquejes, plantones, de viveros...pero hagámoslo.
Un día tomé esa decisión con una parcela, la tierra arcillosa solo era propicia, aparentemente, para olivas. Se me ocurrió traspasar unas nogueras de unos 15 cm allí, eso sí, en el hoyo introduje tierra comprada y como protector, una botella o una maceta de plástico lo suficientemente altas para protegerles del sol.
Comprobé que su crecimiento, lo desconocía, fue más rápido que sus vecinas las olivas. Se adaptaron a la perfección, a pesar de los exigentes veranos, eso sí, al principio no hay que descuidar el riego. Y volví a probar, necesitaba árboles de hoja caduca, para enriquecer esta tierra tan pobre, y llegaron las acacias de tres espinas, árbol de rápido crecimiento que cede al terreno gran cantidad de hojas. Todos son de semilla, se entierran a media profundidad en cualquier semillero y en poco tiempo brotan.
Y llegaron los arces, estos ya tenían 5 cm, los fui recogiendo de las aceras donde proliferan en verano y de donde serán arrancados, y crecen aún más veloces que las acacias, así conseguí en tres años un espléndido sombraje para ir depositando otro tipo de árboles.
Sin olvidar lo fácil que es conseguir olmos y cómo compiten en celeridad con los arces.
Hasta que reparé en que necesitaba frutales para intercalar y compré planta de repoblación, el acierto fueron las moreras, que se adaptaron de maravilla, que soportan las inclemencias como ningún otro árbol y que regalan numerosos frutos.
Veo que he metido demasiada tralla, vayamos pues a las imágenes.
Níspero. Eriobotrya japonica.
No le importa las temperaturas extremas, eso sí, en otro tipo de terreno y con sombra por la tarde sería ya un buen ejemplar.
Acacia de tres espinas, acacia negra, algarrobo de miel, Gleditsia triacanthos.
Le llamo la "reina" de mi particular bosque, porque sus ramas se extienden a manera de como lo hacen las hayas en el norte peninsular, de un porte magnífico. Puede alcanzar los 20 metros.
Árbol del amor, algarrobo loco, árbol de Judas, Cercis siliquastrum
(Se cree que Judas Iscariote se quitó la vida colgándose en uno de ellos, a causa de lo cual crece encorvado)
También es fácil conseguirlo de semillas, su floración lo hace único.
Acer negundo, arce americano, bordo, árbol dioico ( o sea que hay un árbol macho y otro hembra).
Sus semillas crecen en cualquier lugar y en gran número.
Fijáos bien en él, puede alcanzar los 20 m. de altura, nada le afecta, en poco tiempo veréis cómo crece.
Todos los arces vinieron de Villamanrique al igual que otras plantas que me fueron regaladas.
Populus nigra, álamo o chopo negro.
El tintineo que producen sus hojas cuando las mece el viento es cautivador. Crece rápido. Lo conseguí de un esqueje.
Ulmus minor, olmo común, negrillo.
Qué sombraje tan especial nos brindan los olmos.
Recordar el ejemplar tan viejo que existía en la plaza de Albaladejo.
Estos árboles crecen junto a iglesias y en alamedas.
Sus semillas se expanden con el viento.
Aligustre, alheña elevada, siempreverde, aligustre del Japón, Ligustrum lucidum.
Puede alcanzar 15 m.
En medicina tradicional china se usaban las drupas.
Veréis, los aligustres se consideran arbustos, sin embargo, este que tengo proviene de un ejemplar enorme, simplemente recogí unos retoños con raíces y listo. Son durísimos.
Quercus ilex, encina, carrasca, chaparro.
Un árbol sagrado desde tiempos de los celtas. Los tres que tengo son de planta de repoblación, esta hermosa encina ya tiene dos metros.
Pinus pinea, pino piñonero.
Las semillas vinieron de mis paseos por la Sierra de Cazorla.
Son 4 los pinos que crecen esbeltos.
Paulownia tormentosa, paulonia, kiri.
Hasta 30 metros puede alcanzar.
La primera que tuve llegó de un campo de Montiel, de un tallo que habían arrancado, conservaba parte de raíz, no fue complicado que agarrara, las demás provienen de las semillas que va echando la madre, más de 10 metros mide ya.
Este terreno no les cae bien, de ahí que aparezcan con las hojas más pequeñas y crezcan despacio. Todo lo contrario si estuvieran en un campo de buena tierra y bien drenado.
Saúco, Sambucus nigra.
Se le considera arbusto, tuve uno que sí que sobrepasó los 5 m. de altura, todo un árbol majestuoso, de porte airoso y con esos racimos de flores blancas tan espectaculares. Proviene de un tallo que me dio María Juana Muñoz, no lo olvido: "Para que tengas un saúco y te cures los catarros" me dijo.
Prunus domestica, ciruelo.
Me regalaron unos plantones en primavera, solo este llegó a "buen puerto", le está costando pero no permitiré que muera.
Robinia pseudoacacia, falsa acacia.
De las más fáciles para multiplicarse, en unos días sus semillas germinarán. De crecimiento rápido, podrá llegar a los 25 m.
Fraxinus excelsior, fresno norteño, fresno de hoja ancha.
Te viniste conmigo, tu semilla, de un viaje a Asturias. Hasta los 40 m. podrás alcanzar. Te costó adaptarte a este terreno pero con podas frecuentes ya vas creciendo.
Quercus suber, alcornoque.
Compré dos de unos 15 cm. Ahora miden más de un metro. Son de crecimiento lento. No es fácil verlos por aquí. Viven más de 200 años.
Los ejemplares viejos son magníficos en su envergadura, comparables a los castaños, robles y hayas, entre otros.
Quercus pétrea, roble albar.
Proviene de una bellota cántabra.
Os explico aquí cómo conseguir que nazcan bellotas, castañas, avellanas, nueces...En las dos primeras será necesario hacerles con un cuchillo un corte superficial, a la avellana y nuez nada, simplemente enterrarlos (todos) en invierno, bajo ese manto de hojas tan denso que tienen las nogueras, no os será difícil encontrar una y a esperar a la primavera.
Celtis australis, almez, lodoño, aligonero.
Puede alcanzar los 30 m. de altura, sus frutos en otoño están sabrosos, pero si no están maduros producen estreñimiento.
Malus domestica, manzano común.
Para mí es junto a la morera el frutal más fuerte ante este clima tan extremo.
Catalpa bignonioides, catalpa común, árbol indio.
Dentro de las curiosidades debéis saber que todas sus partes son venenosas y que alcanza unos 15 m.
No puede faltarnos en nuestros campos el laurel, Laurus nobilis,
por su uso culinario y medicinal.
Puede alcanzar los 10 m.
Se propaga fácil, alrededor veremos plantitas que sacándolas con cuidado nos darán un nuevo laurel.
Punica granatum, granado.
Este precioso árbol es un regalo que me hizo un adorable anciano, Isidoro, lo sacamos de raíz.
Puede alcanzar los 4 metros, este llegará a ser más alto.
Ficus carica, higuera.
He aquí un árbol que forma parte de nuestros patios, que vemos creciendo aislados entre olivas, junto a muros que delimitan campos.
De crecimiento rápido y muy fácil de coger la pequeña planta en cuanto caen los higos al suelo.
Leo que pueden llegar a vivir 60 años, que su tronco puede medir hasta 3 metros y la altura sería de unos 10.
En el término de Montiel vi una higuera que rebasa esos 3 metros.
Las uvas sin semillas se llaman apirenas.
Vitis vinifera, vid o parra.
Más de 30 m. pueden alcanzar libremente.
Esta fue un regalo de Laudencio, otra persona entrañable.
Melia azedarach, Melia.
También crece rápido y puede llegar a los 10 m.
Crataegus monogyna, majuelo, espino albar o blanco.
Los veréis como arbustos, pero algunos ejemplares se acercarán a los 6 m. y estaréis de acuerdo conmigo en que el perfume de sus flores es embriagador.
Juglans regia, nogal.
Todos los nogales que tengo, más de 20, provienen del mismo árbol. Pensar que pueden alcanzar los 25 m. y vivir más de 200 años y que su abundante hoja enriquecerá terrenos pobres.
Cupressus sempervirens, ciprés común.
Como planta de repoblación los adquirí, crecen muy rápido y nada les afecta.
Morus alba, morera blanca.
Tengo tres variedades de este árbol, sin duda, el fruto blanco es el más sabroso, y el porte y la altura que ha alcanzado uno de estos morales es excepcional.
Todas las adquirí como planta de repoblación.
Pistacia lentiscus, lentisco.
Solo compré este arbusto porque en algunos lugares he llegado a ver lentiscos de más de 4 m. de altura y de buena envergadura.
Este joven ejemplar se adaptó bien al terreno.
Fraxinus angustifolia, fresno de hoja estrecha.
Lo conseguí de semilla.
He visto fresnos gigantes a las orillas de ríos, pueden vivir 100 años.
Tamarix gallica, taray, taraje, tamarisco.Comprado como planta de repoblación, quise probar su adaptación al terreno, al estar cerca de la fuente y a la sombra de un arce crece bien.
Shopora japonica, árbol de las pagodas, acacia del Japón, sófora.
Sí, de semilla, como todas las acacias. Podrá llegar a los 20 m.
Leo como curiosidad de este precioso árbol que al este de Asia se cultiva junto a templos y cementerios.
Thuja, tuya.
En este terreno le cuesta "arrancar" pero tiene vitalidad. Hasta los 18 m. podría crecer.
Olea europaea, olivo.
No podría pasar por alto el único que crecía en el terreno, antes de que tuviera esta idea de añadirle tanta variedad de compañeros.
No hay más que darse una vuelta por nuestros campos para entender lo duros que son, me atrevería a decir que más que las encinas (durante este tiempo de sequía algunas he visto como comenzaban a secarse, olivos no)
Pistacia terebinthus, cornicabra.
Es la última en llegar, gracias a mi hijo.
Tengo hasta el mes de agosto para intentar aprender a injertar, algo que no he hecho nunca.
Acer opalus granatense, arce granadino.
No hay que decir nada acerca de lo fácil de su plantación, solo el arce japonés es algo más complicado.
Aquí crece bien.
Pyracantha mohave.
Un auténtico reto el intentar podarlas, por las espinas, se adaptó muy bien. Hasta 4 m. puede crecer.
Pyracantha coccinea, espino de fuego.
Otro reto, solo que con este ejemplar sí que he conseguido que sea más alto. Espectacular con sus bayas rojas.
Comprado en vivero.
Elaeagnus angustifolia, cinamomo, árbol del paraíso.Llegó en forma de esqueje que agarró con fuerza, cercano a la fuente presenta ya unos 3 metros, leo que llegaría a los 10.
Cuando lo podas desprende un olor especial.
Se pude multiplicar de semilla.
Prunus dulcis, almendro.
A los 3 años de plantarlos dan sus primeras almendras.
Cupressus arizonica, ciprés de Arizona.
Llegó como planta de repoblación, tiene ya un buen porte.
Para acabar os dejo con "mis útiles" imprescindibles para conseguir nuevos arbolitos e ir podando los árboles ya crecidos.
Junio 2023.
Notas:
-Sobre aquellos árboles que se me perdieron: cerezo, castaño, álamo blanco, haya (sí, nació de una semilla pero no aguantó este clima)
Seguiré plantando mientras el agua perdure, árboles de hoja caduca, no lo olviden, los suelos pobres se pueden transformar.
Seguimos con las entradas a esta le has puesto el título plantemos más de un árbol, yo diría el título los árboles en tus manos, no ha habido semilla árbol o como dices esquejes que se te hayan resistido madre mía, qué preciosidades de árboles, no se te resiste nada una vez más enhorabuena por esta cualidad tuya de la naturaleza.
ResponderEliminarGracias Paqui, a la naturaleza se le ha de brindar todo lo que podamos. Un abrazo
Eliminar